- No se debe continuar victimizando a las personas con el uso de la prisión preventiva injustificada, advierte la Senadora sonorense.
“México es una vergüenza mundial, porque mantiene la cárcel obligatoria. Eso está mal y ustedes lo apoyan, porque les conviene políticamente”, afirmó categóricamente la Senadora Lilly Téllez al referirse a la insistencia de Morena por seguir desobedeciendo a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
La Senadora, en una reciente entrevista, se dijo consternada por el mensaje publicado por el gobernador de Sonora en sus redes sociales, en el que, dirigiéndose a la Ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, cuestiona, junto a las gobernadoras y gobernadores, las consecuencias que traería la eliminación de la prisión preventiva oficiosa.
“No entiendo como no le da vergüenza. Usted y yo fuimos compañeros al senado en el 2018, y jamás me hubiera imaginado una traición semejante de su parte al principio de que primero se es inocente hasta que se demuestra lo contrario”, señaló.
Es importante resaltar que, tal como Téllez lo advirtió en el Senado, desde el 25 de enero de 2023, la Corte Interamericana de Derechos Humanos dictó una sentencia en la que determinó que México debe eliminar la prisión preventiva oficiosa.
La representante de Sonora en el Senado hizo un llamado enérgico al gobernador Alfonso Durazo, quien tácitamente se ha manifestado en contra de la presunción de inocencia.
“No doy crédito hasta qué grado ha llegado, gobernador Durazo. Usted sabe que está mal, usted sabe que esto atenta contra los derechos humanos”, dijo.
Al desmentir la versión morenista, que señala que al derogar la figura de la prisión preventiva oficiosa van a quedar más de 80 mil criminales en libertad, puesto que cada caso se revisará a fondo de manera particular, tachó de “sinvergüenzas” a gobernadores y legisladores que se promueven la persistencia de la medida.
“No sean sinvergüenzas. Tengan un poco de honor. Porque van a pasar a la historia como los abusadores contra los derechos humanos más viles y brutales. Es una pena que terminen así sólo por ambición política”, finalizó.